La Corona de María Santísima del Desconsuelo por Jesús Romanov Alfonso

La corona del Desconsuelo me dejó maravillado. Se trata de una pieza neoclásica cincelada en plata de ley, con un canasto formado por círculos en cadeneta en los que se intercalan los espacios llenos con motivos dorados de mayor tamaño, con los vacíos más pequeños. De aqui emergen los imperiales cuya bases son parejas de querubines mientras que la hoja superior es lisa.
La ráfaga la forma una nube con más ángeles y de ella parten los rayos para rematar en cruz y orbe.
Los espacios vacíos, los que quedan sin repujar, así como el contraste del dorado con la plata en su color le aporta una belleza enorme, sensación de algo ligero, etéreo, una pieza por la que la luz se cuela y se proyecta emitiendo brillo.
Fue de las cosas que más me llamó la atención precisamente por alejarse de lo convencional